Cuidado y mantenimiento de vajillas para banqueteros

En la industria de banquetes, cada plato, vaso y cubierto no solo representa un costo, sino también el reflejo de tu marca y la experiencia que brindas. Por ello, es esencial mantener en perfecto estado tu vajilla. 

Con más de 100 años de experiencia y como líderes en México, en Anfora sabemos que una correcta atención y cuidado puede marcar la diferencia entre una vajilla que dura unos pocos años y una que se convierte en un legado. 

En este blog te compartimos algunos consejos para garantizar que tu inversión en vajilla de porcelana vitrificada perdure y siga siendo el centro de atención en tus eventos.

1. La limpieza es fundamental

Sabemos lo agitado que puede ser después de un evento. Entre el bullicio y la prisa por concluir, puede surgir la tentación de finalizar rápidamente la limpieza. Sin embargo, recuerda que tu vajilla es una inversión valiosa y su cuidado determina su durabilidad y presencia en futuros eventos.

• Agua tibia y jabón neutro: En Anfora recomendamos un enfoque suave. Aléjate de esos detergentes agresivos que prometen resultados rápidos pues a la larga desgastan la esencia de la porcelana vitrificada. Un jabón neutro, con agua tibia, conservará el brillo y la belleza de cada pieza por mucho más tiempo.
  
  
• Cepillo suave: Si te encuentras con esas molestas manchas que resisten el lavado, opta por un cepillo con cerdas suaves. Las esponjas ásperas o los estropajos pueden causar rasguños y desgastar el acabado. Recuerda: es el cuidado delicado lo que garantiza la longevidad.
  
  
• Secado al aire: Aunque pueda parecer más rápido y eficiente secar con una toalla, en Anfora creemos que la paciencia da sus frutos. Dejar que tus piezas se sequen al aire libre minimiza el riesgo de rayones y garantiza que la porcelana conserve su acabado intacto.
  
  

Dando a tu vajilla el cuidado que se merece, no solo aseguras una presentación impecable para futuros eventos, sino que también reflejas el compromiso y la calidad de tu servicio en cada detalle. Y si estás buscando vajilla que resista el paso del tiempo y las demandas de la industria de banquetes, siempre estaremos aquí para ofrecerte lo mejor en Anfora.

2. Almacenamiento inteligente
   
   

El brillo y el lustre de tu vajilla no solo dependen de una limpieza meticulosa, sino también de cómo y dónde la almacenas cuando descansa entre eventos. Esa elección marca la diferencia entre una vajilla que dura años y otra que muestra signos de desgaste prematuramente.

• Evita el apilamiento excesivo: Sabemos que el espacio a veces es un lujo, pero trata de resistir la tentación de amontonar tus piezas de vajilla. Aunque en Anfora nos enorgullece la resistencia de nuestros productos, la delicadeza sigue siendo su naturaleza inherente. Al apilar tus vajillas, procura mantener las torres bajas, garantizando que cada pieza tenga el espacio que merece.
  
  
• Separadores: Utiliza paños o separadores de espuma entre platos para evitar que se rayen entre sí. Esta barrera suave protege cada pieza de rayones y desgaste causados por el roce entre ellas.
  
  
• Lugar fresco y seco: ¿Sabías que la humedad puede ser un agente silencioso pero efectivo en desgastar tu vajilla? Elige un lugar fresco y seco para guardar tus piezas. Así asegurarás que cada vez que las saques, brillen con el mismo esplendor que la primera vez que las viste.

En Anfora, creemos que cada pieza cuenta una historia, una que va más allá de su diseño y que está entrelazada con tus propios recuerdos y eventos. Proteger y cuidar tu vajilla es honrar esas historias y asegurar que continúen siendo contadas en los años venideros. Si buscas la combinación perfecta entre durabilidad y diseño, estaremos encantados de ser tu elección.

3. Transporte con cabeza
   
   

Sí, admitimos que llevar tu vajilla de un lugar a otro puede parecer una hazaña digna de un malabarista. Sin embargo, con un poco de planificación y los consejos correctos, puedes asegurarte de que cada pieza llegue a su destino en perfecto estado. Después de todo, no se trata solo de transportar objetos, sino de llevar contigo la promesa de una experiencia culinaria impecable.

• Cajas con compartimentos: ¿Has considerado cajas con compartimentos? Estas maravillas son más que simples cajas; son la armadura de tu vajilla. Diseñadas específicamente para proteger y aislar cada pieza, garantizan que incluso en los caminos más irregulares, tu vajilla permanezca intacta.
  
  
• Menos es más: Podría sonar contradictorio, pero en el mundo del transporte de vajilla, esta máxima es oro puro. Evita la tentación de cargar todo en una sola caja. No solo es más seguro para tu espalda, sino que también reduce el riesgo de accidentes. En Anfora, siempre nos hemos destacado por ser precavidos; preferimos que hagas un viaje extra y que cada pieza llegue perfectamente.

• Cuidado con la temperatura: La porcelana, con todo su encanto y durabilidad, tiene un punto débil: las temperaturas extremas. Si dejas tu vajilla en un vehículo bajo el ardiente sol, puedes estar comprometiendo su calidad. Así que siempre procura estacionar a la sombra o, mejor aún, descarga la vajilla lo más pronto posible.

En Anfora comprendemos los desafíos que enfrentas en cada evento. Pero también sabemos que con los consejos adecuados y la vajilla correcta, estás más que preparado para enfrentarlos. Juntos, hagamos que cada transporte sea una promesa de experiencias memorables y no de preocupaciones.

4. Atención a detalles menores

A veces, los detalles más pequeños son los que marcan la diferencia entre un evento bueno y uno excepcional. Y, claro, la vajilla es una parte crucial de esos detalles. Pero hay otros aspectos, más sutiles, que te ayudarán a prolongar la vida útil de tus piezas y a elevar la experiencia de tus comensales.

• Invierte en un buen lavavajillas: Efectivamente, no todos los lavavajillas son iguales. Si optas por este electrodoméstico, es crucial que selecciones uno con un programa para piezas delicadas. En Anfora recomendamos leer el manual y entender las especificaciones para garantizar el mejor cuidado de la vajilla.
  
  
• Rotación regular: ¿Tienes piezas favoritas que usas con más frecuencia? No olvides rotar tu vajilla. Esto asegura un desgaste uniforme y evita que algunas piezas se vean más usadas que otras.
  
  
• Inspección periódica: Tómate el tiempo para revisar cada pieza de vez en cuando. Busca pequeñas grietas o defectos. Es mejor identificar y retirar una pieza dañada antes de que se convierta en un problema mayor.
  
  
• Instrucción del personal: Puede que parezca obvio, pero asegurarte de que tu equipo comprenda el valor y el cuidado necesario para tu vajilla es vital. Un breve entrenamiento sobre manejo y cuidado puede prevenir muchos accidentes.

En Anfora  sabemos que detrás de cada banquetero hay una pasión por brindar experiencias memorables. Y, con cada pieza de vajilla que creamos, nos sumamos a esa misión.